Aerotermia: qué es, cómo funciona, ventajas y desventajas
La aerotermia es una tecnología innovadora que se posiciona como una de las opciones más atractivas del mercado. Si alguna vez te has preguntado qué es aerotermia, debes saber que es ideal tanto para la calefacción y refrigeración de hogares, como para la producción de agua caliente sanitaria (ACS).
El funcionamiento de este sistema se basa en la captación de la energía térmica presente en el aire exterior, una fuente renovable e inagotable, por lo que se considera una alternativa sostenible y respetuosa del medio ambiente.
En esta entrada exploraremos las ventajas y los inconvenientes de la instalación de una aerotermia, considerando aspectos como el ahorro energético, la reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO₂) y la versatilidad de su aplicación. Asimismo, analizaremos los posibles inconvenientes relacionados con la inversión inicial y el rendimiento en climas extremos. De esta forma, te ofreceremos información valiosa si estás considerando instalar una aerotermia.
¿Qué es aerotermia y cómo funciona?
La aerotermia es un sistema de calefacción y refrigeración que aprovecha la energía térmica del aire exterior para la climatización y producción de agua caliente sanitaria (ACS) en edificaciones. Funciona captando la energía térmica presente en el aire exterior. Una vez captada, esta energía se transfiere a un circuito que se utiliza para climatizar un espacio o calentar agua de uso sanitario. Este proceso se realiza mediante una bomba de calor que utiliza un refrigerante para transferir el calor de un sitio a otro.
Ventajas de la aerotermia
Sostenibilidad
Es una tecnología respetuosa con el medio ambiente que se basa en el uso de un recurso natural y renovable, la energía térmica del aire. Es decir, para su funcionamiento no utiliza combustibles fósiles, lo que reduce las emisiones de dióxido de carbono (CO2).
Eficiencia energética
La bomba de calor aerotérmica tiene un rendimiento hasta cinco veces superior al de una caldera convencional, por lo que, 1 kW (kilovatio) de electricidad puede generar hasta 5 kW de energía térmica para producir calor en invierno, frío en verano y calentar el agua sanitaria.
Ahorro energético
Obtiene la mayor parte de la energía que requiere del aire exterior (alrededor del 70%) y solo necesita una pequeña fracción de electricidad adicional para funcionar, contribuyendo a reducir los cotos de facturación.
Seguridad
La instalación no utiliza combustibles fósiles para su funcionamiento, por lo que no hay riesgo de explosión o incendio en caso fuga o de mal funcionamiento.
Costos de mantenimiento
El mantenimiento regular se enfoca en limpieza e inspección de los componentes del sistema, sin inversiones adicionales.
Versatilidad
Ofrece tres servicios distintos en una misma instalación: calefacción en invierno, refrigeración en verano y agua caliente sanitaria (ACS) durante todo el año.
Inconvenientes
Costo de instalación: el costo inicial de instalación suele ser más alto en comparación con sistemas de climatización convencionales, sin embargo, a largo plazo se compensa con el ahorro en facturas de electricidad.
Climas extremadamente fríos: la eficiencia de la aerotermia puede disminuir en climas muy fríos (-20°C), ya que extraer la energía térmica del aire se vuelve más difícil cuando las temperaturas son muy bajas.
Conclusión
La aerotermia presenta una serie de ventajas significativas, como su eficiencia energética, su contribución a la reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO2), su versátil funcionamiento gracias a una misma instalación y confort durante todo el año. Sin embargo, también es importante considerar su coste inicial y disminuida eficiencia en climas extremadamente fríos.
A pesar de estos inconvenientes, los beneficios que a largo plazo proporciona la aerotermia en términos de eficiencia energética y respeto por el medio ambiente, hacen que merezca una crucial consideración por parte de quienes buscan alternativas más verdes y económicas en la climatización de sus hogares y negocios.
La elección de la aerotermia como sistema de climatización depende de las condiciones específicas y necesidades de cada usuario, pero es claro que representa un paso hacia un futuro más sostenible que busca la implementación de tecnologías responsables y eficientes.