Cocina solar
En lugares soleados, hay que tomarse las cocinas solares en serio, teniendo en casa disponible, eso sí, un medio auxiliar de cocina, porque no siempre cocinamos de día y no siempre luce el sol cuando tenemos hambre. Pero aprovechar la energía solar para cocinar, puede ahorrarnos quizás hasta la mitad de combustible frente a la cocina convencional. Y es gratis.
Existen muchos sistemas diferentes de cocina solar. Desde el más sencillo y portable, hasta complejos sistemas ideados por ingenieros que proporcionan energía a comedores visitados por miles de comensales, como ocurre en la India.
En el site de Terra.org, una ONG catalana, encontrarás tanto desde planos para fabricar las cocinas hasta la posibilidad de comprar online los ingenios mismos, así como otras muchas informaciones interesantes sobre las aplicaciones de la energía solar en pequeños aparatos que a veces incluso podemos construir nosotros mismos.
Las cocinas solares pueden ser desde fijas, hasta pequeños aparatos portátiles que sirven para asar unas brochetas en el campo, eliminando la posibilidad de propagar un incendio con una hoguera.
En principio, fueron ideadas para poder proporcionar energía en campos de refugiados que no disponían de suministro; estaban fabricadas de cartón y papel de aluminio y costaban unos dos dólares. Aún se pueden adquirir.
En los años 70 y 80 el interés por las cocinas solares comenzó a extenderse, y algunas ONG y voluntarios varios idearon modelos para proporcionar energía a familias pobres que no disponían de leña gratuita y debían utilizar combustibles fósiles. También fueron ideadas para lugares donde no existía la posibilidad de cocinar con biomasa.
La cosa se fue extendiendo, y un ingeniero alemán ha llegado a crear un ingenio solar muy sofisticado, con forma parabólica y seguidor solar, pero diseñado pensando en su fabricación en cualquier lugar del mundo, por lo que ha usado materiales convencionales en medidas convencionales y piezas fácilmente obtenibles en cualquier ubicación del mundo.
Las cocinas solares comerciales, fabricadas por una empresa, se pueden comprar online, y también pueden conseguirse online los planos para la fabricación desde los hornos solares más sencillos hasta el mencionado sistema Scheffler, que no goza de patente.
Horno solar fijo
La foto corresponde con la parte externa, situada en la fachada de la casa, que es donde recibe el sol.
La foto corresponde con el horno desde dentro de la casa.
En las imágenes vemos cómo funciona una cocina solar Scheffler a pequeña escala.
Se trata de una parabólica que está programada para seguir el sol y apuntar el rayo hacia una abertura que hay en la cocina, donde se coloca el puchero.
En India, varios templos conectan en serie varios de estos reflectores, que apuntan hacia una tubería que contiene un líquido que alcanza altas temperaturas. Esta tubería llega a un cilindro metálico hueco, que se calienta y que cumple las funciones de fogón, puesto que se coloca el puchero encima.
