Las bombas de calor son sistemas de climatización de alta eficiencia, que pueden producir hasta cuatro veces más energía de la que consumen. Las bombas pueden producir sólo calefacción, sólo aire acondicionado o ambas cosas simultáneamente, en cuyo caso también producen agua caliente. Funcionan con electricidad y su único límite es que reducen su eficiencia cuando la temperatura exterior es inferior a 5ºC.